QUICHE DE GRELOS CON CHORIZO
De todas las quichés está es mi preferida. Realmente es una
idea customizada. Un verano fuimos a pasar unos días a Galicia y allí tuve la
ocasión de probar una de las mejores empanadas que había probado jamás… bueno,
ahora que lo recuerdo, había unas cuantas… (berberechos, mejillones, pulpo,
sardinas…) pero la de grelos con chorizo me impresionó porque es una mezcla
interesante que tiene su origen en la laconada gallega.
La quiche es un plato francés que parte de una base de masa quebrada
y un cuajado de huevo. La más famosa o conocida es la quiche lorraine que
fundamentalmente, lleva bacon y champiñón, pero según se le vayan añadiendo
ingredientes va cambiando los nombres.
Actualmente, las variaciones son infinitas porque la quiche,
además de ser muy fácil de hacer, es un plato muy agradecido, que puedes tomar
frío o caliente y que permite desarrollar tu creatividad a límites
insospechados.
Yo hoy presento mi propuesta de quiche de grelos con
chorizo. Todo un descubrimiento
Ingredientes
- Un paquete de masa quebrada
- Un bote de grelos
- Dos chorizos de guisar (sin son ahumados muchísimo mejor)
- Tres huevos
- Un vaso de leche
- Una cucharada de aceite
- Sal y pimienta
Preparación
En primer lugar vamos a sacar de la nevera la masa quebrada
porque necesitamos que se atempere.
Pasado un rato, la desenrrollamos y la
pinchamos sobre toda su base con un tenedor y la estiramos sobre un molde redondo sin retirar
el papel que viene junto a la masa.
En una sartén, echamos la cucharada de aceite. Sacamos los
grelos del bote y los escurrimos bien en un colador. Partimos los chorizos
verticalmente en dos mitades y después en rodajas, de forma que hacemos unos
taquitos de chorizo.
Cuando el aceite de la sartén está caliente, echamos el
chorizo y rehogamos ligeramente y, a continuación, los grelos. Lo damos una
vuelta todo junto durante unos minutos. Apagamos y reservamos en la sartén.
En un bol, ponemos los huevos y los batimos. Añadimos el
vaso de leche (puede ser desnatada) y lo salpimentamos (yo soy muy generosa con
la pimienta).
Echamos el contenido de la sartén (grelos y chorizo
rehogados) en la mezcla del huevo y leche. Removemos todo junto hasta que quede
bien mezclado.
Cuando lo tengamos todo mezclado, lo echamos al molde que ya
tenemos preparado con la masa estirada y pinchada.
Cuanto termine su cocción lo sacamos y, si nos apetece, le
podemos rallar por encima un poco de queso parmesano… Sí, ya sé que me cargo el
toque gallego, pero el queso se fundé sobre la base todavía caliente de la
quiché y le da una jugosidad y sabor extra, escondido.
¿Qué os ha parecido?
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